Entradas

Mostrando entradas de octubre, 2025

Abrazando el deseo

Imagen
Nuestros cuerpos desnudos se fundieron en un abrazo, sentí un escalofrío serpentear por mi columna, mi piel ardía ante tus caricias, mi entrepierna humedecida reclamaba tu roce. Tus labios recorrieron mi cuello, mordiendo con deseo, mientras tus manos me atrapaban contra tu dureza palpitante. Gemí, temblando bajo el roce de tu sexo rozando el mío, húmedo, ansioso. Me giraste con fuerza, mis pezones se endurecieron al contacto de tu pecho caliente. Hundiste tus dedos en mí, arrancándome jadeos ahogados. Yo, perdida en tu boca, solo podía suplicar que me tomaras de una vez, que me hicieras tuya sin freno. Tus dedos me abrieron con hambre, deslizándose dentro de mí deliciosamente. Gemí contra tu boca, ahogada por el deseo, mientras tu miembro duro frotaba mi entrada húmeda, arrancándome espasmos de placer. Te apartaste apenas para mirarme, tus ojos ardían, se oscurecieron y de un solo movimiento me penetraste con fuerza, haciéndome gritar. El choque de tu cuerpo contra el mío llenaba la h...

El regalo prohibido

Imagen
Sonrió al verme temblar cuando la puerta se abrió y la otra chica entró. Se acercó despacio, el eco de sus tacones resonaba por la habitación conforme caminaba hasta mí mezclándose con el sonido de mis latidos. Ella lo miró buscando su permiso, él respondió con una sonrisa. —Hoy no estarás sola —dijo, acomodándose en el sillón como espectador y dueño. La recién llegada rozó mi cuerpo desnudo, sus manos recorrieron la curva de mi espalda, bajando hasta mi culo firme cubierto por las medias. Un gemido escapó de mi garganta al sentir la caricia femenina, mientras él, expectante, apretaba los brazos del sillón. Una fantasía hecha carne, tenía dos bocas, dos lenguas, dos sumisas a su voluntad. Ambas observamos el deseo en su mirada. Nuestras lenguas se encontraron con timidez, y él endureció la voz: —Más profundo.—  Entonces nos devoramos con hambre, nuestra respiración agitada llenaba la sala. Sus pupilas se clavaban en cada movimiento. Mientras la otra chica se acariciaba los pechos, ...